La imagen de hoy, de hace unos pocos años, quiere ser un homenaje a esas viejas tradiciones que aún se mantienen en algunos pueblos y que, generación tras generación, se repiten.La fiesta de la Sacramental de Villavaler, conocida oficialmente como fiesta del Corpus Christie, además de los "volaores", la misa y el vermout, tiene como especial elemento la procesión de la Virgen y el Niño hasta el cruce de la carretera y alrededor del viejo texu que domina el Campo la Iglesia.
Siempre me han parecido adorables estas pequeñas tradiciones de pueblo. Y de mis viajes por esos mundos de Dios, siempre recuerdo especialmente esas pequeñas historias que te encuentras en cualquier esquina, más que los grandes fastos.
Y respecto al texu, podeis ver una buena foto en los favoritos del blog (ver "Naturaleza").
P.D.: Adivina, adivinanza, ¿quién es el único que, en la procesión, se tapa sus partes pudendas?.
2 comentarios:
De la adivinanza no estoy muy seguro, pero el que lleva el palio a la izquierda del cura, es mi suegro José Luis, y aunque sin mucha certeza, el de la derecha podría ser nuestro tío Ángel.
Alguna vez he oído contar a mamá que al borde del camino que cruza por el extremo opuesto a la iglesia, había una hilera de enormes robles o castaños, tan antiguos o más que el texo. Parece que en la posguerra, un cura de infausta memoria (y no solo por ésto), vendió los árboles a un maderista y se embolsó las perras. Y hasta hoy.
Estoy de acuerdo.Existe algo atávico en las tradiciones populares que nos retrotrae a un mundo mejor,aunque perdido: el de nuestra infancia.
Memorable la foto de los ciclistas(5 de mayo).Aunque Juan lleva ventaja:Él va en moto...
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